Más de 60.000 personas pueden infectarse de cólera en Zimbabue si la epidemia sigue fuera de control, alertó ayer la Organización Mundial de la Salud (OMS). Las últimas cifras facilitadas por este organismo de la ONU bordean los 14.000 afectados y los 600 muertos. Mientras el presidente de EEUU, George Bush, se sumaba al coro de voces que reclaman al líder zimbabuense, Robert Mugabe, que deje el poder, Harare respondía que la epidemia está "bajo control" y que responderá con "medidas graves" a las "amenazas" occidentales.

La epidemia golpea ya a nueve de las 10 provincias del país y a ojos de buena parte del mundo ha sido la gota que ha colmado el vaso de la crisis que sacude el país.