Mientras los líderes del levantamiento popular contra Muamar Gadafi siguen ganando posiciones sobre el terreno en Libia los hilos de la diplomacia internacional continúan moviéndose, especialmente en Nueva York, donde esta madrugada, tras varios aplazamientos, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó por unanimidad un paquete de «duras» sanciones contra el régimen libio. Entre estas figura instar al Tribunal Penal Internacional de La Haya (TPI) a juzgar a Muamar Gadafi por crímenes contra la humanidad, y la prohibición de que el dictador libio y 15 miembros de su familia o personas de su círculo de poder puedan viajar.

Además, todos los bienes en el exterior pertenecientes a Gadafi, su hijo Saif al-Islam y otros cuatro miembros de su familia serán bloqueados. La resolución contempla también otras medidas como el embargo de armas al régimen dictatorial, La posibilidad de que Gadafi pueda ser acusado por crímenes de guerra fue durante toda la jornada de ayer el principal obstáculo que hubo que salvar para la aprobación de la resolución, especialmente debido a las reticencias de China, que alegaba para oponerse que semejante medida podía poner en riesgo a sus ciudadanos en el país africano.