La misión de la ONU en Afganistán evacuará temporalmente a parte de sus trabajadores extranjeros por motivos de seguridad, ha informado hoy su portavoz, Aleem Siddiqui.Siddiqui ha explicado que la medida, que se aplicará en los próximos días, afectará a unos 600 empleados extranjeros, de los que algunos serán reubicados dentro del país y otros enviados a otros destinos fuera de Afganistán.

El portavoz ha precisado que la misión de las Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) dispone de unos 5.000 trabajadores, de los que el 80% son afganos.La medida se ha adoptado después de que el pasado 28 de octubre cinco empleados del organismo internacional perdieran la vida y otros nueve resultaran heridos en un atentado contra la casa de huéspedes en la que vivían en Kabul.

Revisión de la seguridad

"No nos vamos a ningún sitio. Llevamos más de medio siglo en Afganistán y los programas continúan. Evidentemente los recientes acontecimientos trágicos nos fuerzan a revisar la seguridad", ha asegurado el portavoz.En un comunicado, la ONU ha dicho hoy que el organismo está "dando pasos adicionales para reducir los riesgos de su personal nacional e internacional" en Afganistán.

En la sede de las Naciones Unidas, la portavoz del organismo, Michele Montás, manifestó ayer que los responsables de seguridad revisarían todos los aspectos relacionados con las medidas de protección con las que cuenta la organización mundial en el país asiático."La misión de la ONU está examinando los mecanismos de seguridad en Kabul y otras partes del país, con el objeto de reforzar la protección de las instalaciones de las Naciones Unidas y sus casas de huéspedes", declaró Montás en una rueda de prensa.

Reunión con Karzai

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, se reunió el lunes con el presidente electo, Hamid Karzai, en Kabul y le pidió que las fuerzas de seguridad afganas contribuyan a incrementar la seguridad las instalaciones de la organización.