El alto comisario de las Naciones Unidas para los refugiados, Ruud Lubbers, aseguró ayer que una guerra en Irak, en la que muy probablemente se utilizarían armas químicas y biológicas, llevaría a una auténtica catástrofe. "Desde el punto de vista humano, sería un verdadero desastre", afirmó Lubbers en una entrevista a la emisora de la BBC.

El máximo responsable de la ACNUR pidió a la comunidad internacional que evite la guerra y que no intervenga a no ser que el presidente iraquí, Sadam Husein, "no pueda ser desarmado" de otra forma. "Sólo si Sadam Husein no acata las inspecciones puede haber razones para una intervención militar", añadió.

El viceprimer ministro iraquí, Tarek Aziz, ha pedido a los embajadores de Irak en el extranjero que expliquen con detalle, en los países ante los que están acreditados, "las consecuencias que una agresión de EEUU contra Irak tendría para la seguridad de la región", señaló el diario As Saura . Irak anunció que "en dos o tres días" entregará la lista de los científicos que trabajaron en los anteriores programas armamentísticos.