La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, recordó hoy que los Estados deben proteger la privacidad de sus ciudadanos y que ésta sólo puede ser violada bajo el paraguas de la ley.

"La Convención Internacional sobre Derechos Políticos y Sociales requiere de los Estados que protejan a las personas de interferencias arbitrarias e ilegales de su privacidad. En otras palabras, cualquier acto que tenga un impacto en la privacidad de una persona debe ser legal", afirmó en una rueda de prensa el portavoz de Pillay, Rupert Colville.

"Esto significa que cualquier búsqueda, vigilancia o recolección de datos acerca de una persona debe ser autorizada por la ley", agregó.

Por su parte, el Comité de Derechos Humanos, que vigila el cumplimiento de la Convención, recordó en la misma línea que "la obtención de información personal en ordenadores, datos bancarios, sea por autoridades públicas o individuos, debe ser regulada por la ley".

El centro de escuchas de la inteligencia británica (GCHQ) intercepta y almacena correos, mensajes y llamadas de todo el mundo que circulan por las redes de comunicaciones, publicó recientemente el rotativo británico "The Guardian".

Las informaciones del diario proceden de documentos filtrados por Edward Snowden, el excolaborador de la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense (NSA) que destapó este mes un programa de EEUU para acceder a los datos de millones de ciudadanos almacenados en servidores de Google, Facebook y Skype.