La OPEP decidió ayer mantener el actual nivel de producción de petróleo y reservarse la capacidad productiva que aún le queda para un caso de escasez en el mercado, como consecuencia de una guerra con Irak. Este es el resultado de la reunión ministerial de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) que se realizó ayer en Viena.

El temor a que durante un conflicto armado con Irak se corten los más de dos millones de barriles diarios de crudo que exporta Bagdad ha marcado la sesión de la OPEP. "De momento no es necesario aumentar las cuotas", pero si debido a una guerra contra Irak se llega a una situación de escasez, los países de la OPEP reaccionarían "rápidamente", manifestó el ministro de Petróleo de Qatar y presidente de turno de la OPEP, Abdullah bin Hamad Al Attiyah.

CARRERA ALCISTA

Los precios del crudo han aumentado un 41% hasta los 33 dólares por barril en el mercado de Londres durante el pasado año, mientras que las reservas en EEUU han disminuido sensiblemente. Sin embargo, los productores no consideran que haya motivo de alarma. "Si se eliminan los tambores de guerra, veremos cómo caen los precios a niveles más aceptables", comentó el ministro saudí del petróleo Alí Al Naimi. "Nos aseguraremos de que el mercado tenga suficiente petróleo", agregó.

Lo que significa que la OPEP seguirá garantizando el abastecimiento de petróleo también en caso de guerra. El titular venezolano de Energía, Rafael Ramírez, cifró ayer en 3 millones de barriles diarios "la capacidad ociosa", es decir, no utilizada, de la que dispone la OPEP con la que aumentaría rápidamente la oferta.

MERCADO EQUILIBRADO

Los ministros de los países de la OPEP coincidieron en destacar que ahora el mercado está equilibrado y no se justifica un aumento de la producción por lo que mantienen vigentes las actuales cuotas de extracción que, desde el primero de febrero pasado, suman 24,5 millones de barriles diarios, sin las exportaciones de Irak.