Los demócratas atacaron ayer sin piedad la imagen positiva que George Bush dio sobre su gestión en el discurso sobre el estado de la Unión. La oposición le acusó de haber aislado a EEUU con su unilateralismo, de encubrir su favoritismo fiscal hacia los ricos y las empresas, y de no haber sido capaz de levantar la economía y crear empleo.

Parafraseando la expresión eje del mal --empleada por Bush para englobar a Irak, Irán y Corea del Norte--, el exgeneral Wesley Clark, aspirante demócrata a la Casa Blanca, disparó contra el presidente diciendo que ha creado su propio eje del mal: "Un eje de políticas fiscales que amenazan nuestro futuro, políticas exteriores que amenazan nuestra seguridad y políticas nacionales que dejan a las familias en el último lugar".

"Yo creo que hay dos mundos, el que menciona el presidente y el que habitan los estadounidenses", arremetió el senador John Kerry, otro aspirante. "Mientras aumentan los sueldos de los directivos, el ciudadano medio sólo ganó tres centavos más por dólar el año pasado", declaró.

"El presidente nos metió en esa guerra en base a afirmaciones sin pruebas y fracasó en levantar una coalición internacional", arremetió la líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.