La inminente puesta en libertad de tres secuestrados de las FARC es vista en Colombia como una nueva posibilidad de alcanzar un acuerdo humanitario más amplio. Según el presidente de la Conferencia Episcopal Colombiana, se ha dado un "gran paso" en ese sentido y hay que seguir avanzado "de manera ágil". La Iglesia ratificó su disposición a servir de garante de un eventual entendimiento. El presidente del opositor Polo Democrático Alternativo (PDA), Carlos Gaviria, habló de "una ventana que se abre y que nos da una esperanza". Lo mismo dijo el expresidente Ernesto Samper (1994-1998).