Las irregularidades durante y tras la jornada de votación han protagonizado las primeras elecciones legislativas celebradas en Kosovo, el pasado domingo, después de acceder a la independencia en el 2008. El primer ministro kosovar, Hashim Thaçi, no esperó a los resultados oficiales para proclamar la victoria de su formación política, el Partido Democrático de Kosovo (PDK), algo que de inmediato fue impugnado por su principal rival, Isa Mustafá, alcalde de Pristina, de la Liga Democrática de Kosovo (LDK).

Durante una conferencia de prensa, Diris Pack, diputada europea y miembro de la misión de observación europea de las elecciones, admitió "graves acusaciones" de dos municipalidades de Srbica y Glogovac, donde la tasa de participación había superado el 90%, lo que contrastaba con una participación a nivel nacional del 47,80%.