El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, reiteró hoy en Kabul que la organización que dirige continuará apoyando a Afganistán tras el fin de la misión en 2014, pero con otro nombre diferente al del actual contingente (ISAF).

"La ISAF (la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad) ha aprobado que Afganistán tomará el control de la seguridad y la OTAN apoyará Afganistán después de 2014 pero con otro nombre", señaló Rasmussen en una rueda de prensa en la capital afgana.

"Algunas de las instalaciones de la ISAF han sido transferidas a las fuerzas de seguridad afganas y estudiaremos de forma conjunta nuevas transferencias", dijo el máximo responsable de la OTAN.

Rasmussen llegó hoy a la capital afgana en una visita sorpresa para entrevistarse con el presidente de Afganistán, Hamid Karzai, y los comandantes de la ISAF.

En su agenda se incluyen la transición de la seguridad a las fuerzas afganas, la nueva misión de la OTAN y las elecciones presidenciales de 2014.

Los ministros de Defensa aliados decidieron en febrero en Bruselas mantener una misión reducida, de entre 8.000 y 12.000 efectivos, en Afganistán después de 2014, cuando concluya la misión ISAF en ese país.

Esta presencia limitada se compensará financiando durante varios años más las fuerzas armadas afganas en su nivel actual, que es de 350.000 soldados.