El comandante supremo de la OTAN, el general estadounidense John Craddock, ha pedido a los 26 países aliados entre 4.000 y 5.000 soldados para resolver el grave problema actual de la falta de tropas de reserva en la peligrosa misión de estabilización de Afganistán, según revelaron ayer fuentes atlánticas.

El general Craddock presentará a los ministros de Defensa de la OTAN, en la reunión del jueves y el viernes próximos en Sevilla, un informe en el que detalla la necesidad de crear seis batallones de reserva para la fuerza internacional de Afganistán antes de la temida ofensiva de primavera de los talibanes.

Uno de los batallones estaría en la zona oeste bajo responsabilidad española. La peligrosidad de la zona oeste es uno de los argumentos del Gobierno español para rechazar que sus tropas puedan ser utilizadas en otras partes.