El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha felicitado este miércoles a Donald Trump por su victoria en las elecciones estadounidenses y le ha pedido “liderazgo” ante los retos a los que se enfrentan los miembros de la Alianza Atlántica. “Estoy deseando trabajar con el presidente electo Trump”, ha dicho en una breve comparecencia en Bruselas junto al presidente de Bosnia-Herzegovina, Bakir Izetbegovic. durante la que ha recordado al que será nuevo inquilino de la Casa Blanca de los desafíos que tienen por delante.

“Nos enfrentamos a nuevos desafíos en seguridad, incluida la guerra híbrida, ciberataques, la amenaza del terrorismo. El liderazgo de EEUU es más importante que nunca”, ha asegurado sobre el país que más tropas aporta a la OTAN. El político noruego también ha recalcado que es importante que los lazos trasatlánticos sigan siendo fuertes y ha recordado que la Alianza ha unido a los amigos más cercanos en tiempos de paz y conflictos durante casi 70 años. “Una OTAN fuerte es buena tanto para Estados Unidos como para Europa”, sostiene.

Según su análisis, la OTAN ha respondido “con determinación a la nueva situación de seguridad” pero asegura que tienen todavía mucho trabajo por delante y espera reunirse pronto con el futuro presidente de EEUU para darle la bienvenida a la organización. Stoltenberg, mucho más prudente que la ministra alemana de Defensa -que ha indicado este miércoles estar en estado de shock-, ha eludido sin embargo entrar a valorar las críticas vertidas por el republicano al bando aliado en el último año.

EL GASTO Y PUTIN

Trump lleva meses poniendo en cuestión que EEUU deba asistir a los países aliados de forma automática ante un eventual ataque de Rusia o de cualquier otro país, aunque se active la cláusula de defensa mutua, y condiciona ese apoyo a que los países de la Alianza Atlántica empiecen a aumentar su gasto en defensa. “Prefiero ser capaz de continuar con los acuerdos existentes, pero solo si los aliados dejan de aprovecharse de una era de generosidad estadounidense que ya no es asequible”, advertía en verano. Y como magnate de los negocios ha puesto siempre el acento en el dinero. “Estamos gastando dinero. Estamos gastando una fortuna”, ha alertado.

Pero si hay un elemento que causa especial inseguridad y temor en la UE es la complicidad que ha mostrado con el presidente ruso, Vladimir Putin, a quien ha mostrado una admiración que es mutua y que permanece en el foco de las críticas de la OTAN desde hace meses por las continuas violaciones de los cazas rusos del espacio aéreo de algunos miembros del bando aliado. “Es brillante, muy pintoresco, tiene mucho talento. Un líder absoluto”, ha dicho de él el dirigente ruso. “Es un gran honor ser halagado de esa forma por un hombre tan respetado dentro de su país y más allá”, le respondía Trump. “Somos muy diferentes pero nos llevaríamos bien”, añadía hace unos meses.