Asistentes al mitin con el que José María Aznar clausuró ayer un acto sobre sanidad del PP, en Arganda del Rey (Madrid), agredieron a golpes y puñetazos a un joven que interrumpió el discurso del presidente para pedirle que no apoye la guerra contra Irak. La actuación de los servicios de seguridad y de organización del PP, que lo redujeron y expulsaron, evitó que el pacifista sufriera un ataque más grave, porque se produjeron numerosos intentos de agresión por parte del público.

CONDENA A ETA

La intervención de Aznar en este mitin se inició con una muestra de solidaridad con los socialistas por el atentado de ETA contra Joseba Pagazaurtundua. El joven pacifista esperó a que concluyera la condena de ETA y, cuando el presidente popular empezaba a hablar de sanidad, se levantó de su asiento, situado enfrente de Aznar, y le gritó: "No a la guerra".

Durante un par de minutos, los asistentes al acto que le rodeaban, sobre todo personas mayores, intentaron acallarle por la fuerza y le agredieron, unos con puñetazos y otros tratando de tumbarle sobre las gradas. Al mismo tiempo, gran parte del público insultaba al pacifista llamándole "hijo de puta", "cabrón" y "asesino", en medio de gritos de "¡España!, España!".

El joven siguió recibiendo golpes hasta que llegaron varios miembros del servicio de seguridad y del servicio de organización, que se lo llevaron casi a rastras mientras asistentes el acto trataban de agredirle a puñetazos y patadas. Alguno de ellos le alcanzó y logró romperle las gafas. El presidente, que contempló el suceso acodado en el atril con los brazos cruzados, dijo que sabía que iba a pasar lo que sucedió. Aznar añadió que esto pasa en España porque hay democracia y se puede pedir "paz y no guerra", algo que, dijo, también él defiende.

José María Aznar añadió que en Irak, por el contrario, los ciudadanos no pueden hacer esa reclamación a su presidente, porque si lo hacen, "les asesinan".

El PP anunció ayer que iniciará en breve una amplia campaña informativa y publicitaria para justificar ante la opinión pública su postura sobre el conflicto iraquí.

Otro de los opositores a que España entre en la guerra de Irak es la dirección de Unió Democr tica, que forma parte de CiU, antiguo socio del PP, que acordó ayer que el partido participará en las manifestaciones contra la guerra convocadas para el sábado 15.