Tras cinco días de combates, el Ejército de Pakistán anunció ayer la detención de un centenar de presuntos militantes de la organización Al Qaeda en una vasta operación militar en la zona fronteriza con Afganistán, aunque, contrariamente a lo anunciado en días anteriores, prácticamente descartó que Ayman al Zauahiri, mano derecha de Osama bin Laden, se encontrara rodeado en esa región montañosa. Según las fuerzas de seguridad paquistanís, al menos 13 civiles han perdido la vida debido a los combates.

Fuentes militares paquistanís admitieron que el "objetivo de gran valía" que habían vaticinado es probablemente un dirigente uzbeko o checheno, según dedujeron de las transmisiones de radio interceptadas. La feroz resistencia de los activistas hizo pensar en un importante dirigente de Al Qaeda.