El limosnero del papa Francisco, Konrad Krajewski, será el encargado de distribuir entre los comedores para necesitados de Roma los 750 kilos de pularda que una empresa de Ourense regaló hoy para este fin al pontífice argentino.
Así lo anuncia el diario del Vaticano "L'Osservatore Romano", que señala que Krajewski, en nombre del papa, se encargará de distribuir este tradicional alimento navideño en los comedores para pobres de Roma, empezando por la estructura que gestionan las monjas de Madre Teresa de Calcuta.
El presidente de la cooperativa Coren, Manuel Gómez-Franqueira, y los consejeros María Gómez-Franqueira y Javier Bobillo, tuvieron la oportunidad hoy de saludar al papa durante la audiencia general de los miércoles y explicarle la iniciativa, la historia de la cooperativa y la forma en la que se cría la "Pularda del Convento".
Según "L'Osservatore romano", la idea de regalar las pulardas a los pobres fue de José Luis, un niño de 7 años, hijo de una de las socias de esta empresa gallega.
Coren es una cooperativa formada por cerca 7.000 familias y son cooperativistas las 24 hermanas de la comunidad de las Clarisas del Convento de Allariz, que se encargan de criar a estos animales.
La "Pularda del Convento" de Coren es el resultado de una cría esmerada y totalmente tradicional.
Un vehículo frigorífico partió el 16 de diciembre de las instalaciones que la cooperativa posee en Santa Cruz de Arrabaldo con destino a la ciudad-Estado del Vaticano.
Los representantes de Coren que hoy han tenido la oportunidad de saludar al papa Francisco han expresado su satisfacción con Francisco, que se ha mostrado "muy cercano y entusiasmado de poder conocer la historia" de esta empresa gallega, informa el grupo en un comunicado.
El presidente de Coren explicó a Su Santidad que los orígenes de la cooperativa se remontan a finales de los años cincuenta, un momento en el que muchos gallegos tenían que emigrar a Argentina, precisamente el país de origen del papa, en busca de un futuro mejor.
De hecho, el Santo Padre les recordó que a todos los españoles que en aquellos años llegaban a Argentina se les llamaba "gallegos".
Gómez-Franqueira también comentó con el Papa que la actividad de su empresa se asienta en valores como la unidad y la cooperación, los mismos que el Santo Padre "transmite con tesón y firmeza".
Los directivos, señala la nota, celebraron la receptividad del Papa y remarcaron que esta visita supone "un acontecimiento histórico" para la cooperativa.
