El premio Nobel de la Paz al disidente chino Liu Xiaobo demuestra que Occidente no puede soportar la idea del auge de China como país. Eslo que sostienen hoy los medios de comunicación oficiales. A juicio de Global Times, el diario que estos días está dirigiendo el ataque de los medios chinos a la concesión del Nobel a Liu Xiaobo, el galardón es una muestra más de los "prejuicios" de la comunidad internacional, que siente un "extraordinario terror" del auge de China y de su modelo económico.

El rotativo también rechaza cualquier posibilidad de que el régimen de Pekín permita la existencia de una democracia plural. Si esto ocurriera, "el destino de China no sería mejor que el de la Unión Soviética y Yugoslavia, y el país probablemente entraría rápidamente en crisis", sostiene el Global Times en su editorial

El China Daily, otro de los portavoces del Gobierno chino, afirma en su editorial que el galardón al disidente es "parte del complot contra China" y lo considera una interferencia en los asuntos internos del país. Este rotativo también descarta que el Nobel vaya a suponer una apertura del régimen. A su juicio, lo único que puede comportar es ampliar la gran brecha ya existente entre China y Occidente.

REPRESALIAS CONTRA NORUEGA

El malestar de China con Occidente es especialmente intenso respecto a Noruega, país que acoge al Comité Nobel, que organiza y concede los premios. El Gobierno de Pekín ya advirtió el viernes a este país nórdico de que peligraban las relaciones bilaterales. De nada ha servido que el Ejecutivo noruego aclarara que el Comité Nobel es un organismo independiente. Hoy, el régimen ha anulado un encuentro previsto para este miércoles en Pekín entre los ministros de Pesca de China y Noruega. Esta sería la primera reacción oficial de China contra Noruega por la concesión del Nobel a Xiaobo, según ha confirmado la portavoz del Ministerio de Exteriores noruego, Ragnhild Imerslund.