El rearme "a gran escala" de Rusia, anunciado para el 2011 por su presidente, Dmitri Medvédev, no supone una amenaza para EEUU, según afirmó ayer el portavoz del Pentágono, Geoff Morrell. "Rusia --declaró Medvédev-- es un país soberano e independiente, que tiene derecho a dotarse de una sólida defensa personal".

El secretario de Defensa de EEUU, Robert Gates, ya citó los problemas que afrontaría Rusia para mantener el grueso de su fuerza armada convencional debido al bajo crecimiento demográfico que se registra en el país. En consecuencia, Gates advirtió de que Washington había constatado la "masiva inversión rusa en su arsenal nuclear.

El Departamento de Estado aseguró que la Administración de Obama busca una relación "muy productiva" con Moscú. Rusia y sus exaliados de Asia Central han permitido el tránsito de los suministros militares de la OTAN que van camino de las operaciones en Afganistán. En cambio, Kirguizistán decidió el mes pasado cerrar una base aérea norteamericana tras recibir generosos créditos y ayudas de Moscú.