Nacido hace 44 años

Padre de cuatro hijos

Diputado por Henley

Periodista hasta el 2005

Hay encuestas para todo. Según una, el rubio y desgreñado Boris Johnson es el único político al que los británicos reconocen incluso cuando le fotografían por detrás. Y, para hablar de él, con decir "Boris", basta. Casado con una abogada, grande y fofo como un jugador de rugbi jubilado, su figura es inconfundible. La popularidad le viene de un show político en televisión --I Got News For You-- donde ha promocionado su propio personaje, caótico y ocurrente. Pero Johnson también es famoso por soltar impertinencias reaccionarias y racistas contra homosexuales, africanos, habitantes de Liverpool o de Nueva Guinea.

El nació entre privilegios, en una familia conservadora, de esas que tienen todos los resortes. Se educó en Eton y Oxford, como David Cameron. Hace siete años se hizo con el codiciado escaño de Henley, tras la jubilación del exministro Michael Heseltine. El trabajo de diputado lo compaginó con su otra carrera, la de periodista, hasta hace tres años cuando dejó la dirección de la revista Spectator. Individualista, indisciplinado, incontrolable, cuando el pasado septiembre se anunció que sería el candidato a la alcaldía de Londres a todo el mundo le pareció una broma. No tomarle en serio fue un error.