Tras una larga investigación, la policía israelí ha reunido los elementos necesarios para pedir a la Fiscalía General el procesamiento del ministro de Asuntos Exteriores, el ultranacionalista Avidgor Lieberman, por corrupción, blanqueo de dinero y obstrucción a la justicia.
En un comunicado hecho público ayer, la policía afirma que tras nueve años de investigación, se han hallado "pruebas" de la culpabilidad de Lieberman. El jefe de la diplomacia israelí, que dirige el partido derechista Israel es Nuestro Hogar, socio del Gobierno del primer ministro, Binyamin Netanyahu, ha negado los cargos y atribuye las acusaciones a una "campaña de persecución" política contra su persona.
Lieberman se hizo con la cartera de Exteriores el pasado mes de marzo, tras pactar el Ejecutivo con Netanyahu. Ahora el caso está en manos del fiscal general del Estado, Menahem Mazouz, que es quien deberá decidir se inculpa o no a Lieberman. Por otro lado, la Autoridad Nacional Palestina (ANP) criticó con dureza el desalojo de dos familias palestinas --un total de 45 personas-- de sus viviendas situadas en el barrio de Sheij Yarrah, en Jerusalén Este. Las casas han pasado a manos de familias judías. "Este paso es el golpe de gracia al proceso de paz", afirmó Rafiq al-Huseini, director de la oficina de la presidencia de la ANP.
