La policía turca arrestó el jueves a numerosos miembros del partido kurdo recientemente prohibido, incluyendo a varios alcaldes, bajo la sospecha de mantener vínculos con la formación política ilegalizada.

Entre los 43 arrestados hay miembros de pleno derecho del Partido de la Sociedad Demócrata (DTP) o activistas vinculados a dicha formación, la única que representa a la etnia kurda que cuenta con representación en el Parlamento de Ankara. Otras fuentes elevan la cifra total de arrestados a entre 60 y 80.

Tras las redadas policiales, alrededor de un millar de personas se congregaron pacíficamente frente a la sede en Diyarbakir de otra fuerza política kurda, el Partido de la Paz y la Democracia (BDP), mientras algunos miembros se reunían en el interior del edificio. El alcalde de la localidad, Osman Baydemir, advirtió al Estado turco de que no tendrá a nadie con quien negociar o dialogar si continuaban las detenciones: "Si este proceso de purgas continúa, proclamo lo más obvio: llegará un día en el que no tendréis a nadie con quien estrechar la mano".

VINCULOS CON EL PKK El 11 de diciembre, el Tribunal Constitucional prohibió al DTP por mantener vínculos con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), un movimiento separatista considerado como una organización terrorista por Turquía, la UE y EEUU. Los milicianos del PKK desde el territorio iraquí lanzan incursiones en territorio turco que han provocado la intervención del Ejército de Ankara en el país vecino del sur.

Entre los detenidos se encuentra uno de los abogados del líder del PKK encarcelado, Abdulá Ocalan. Las restantes detenciones se produjeron en las ciudades de Siirt, Sirnak y Sanliurfa, así como en Ankara y Estambul. La ilegalización del DTP, a la que se opuso el actual primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, ha traído una ola de protestas y desórdenes en todo el sureste de Turquía, país que lleva tiempo solicitando el ingreso en la UE. Precisamente, la Comisión Europea ha criticado la decisión del tribunal de prohibir al DTP, pero reprochó al partido haber mantenido vínculos con la guerrilla kurda que lucha desde Irak.