El Gobierno de Polonia retirará todos los cargos que pesaban contra el exjefe de los servicios secretos del país Zbigniew Siemiatkowski, acusado de estar vinculado con la presunta prisión secreta que operaba la CIA en el país europeo, donde supuestamente se retuvo y torturó a sospechosos de terrorismo.

La decisión ha sido tomada por la Fiscalía de la localidad de Cracovia, según ha informado el diario polaco 'Gazeta Wyborcza'. Pese a que la investigación sobre el centro secreto se inició en 2008, fue en 2012 cuando se presentó la acusación contra Siemiatkowski.

En octubre de 2010, el Gobierno polaco admitió por primera vez su participación en el programa secreto de la CIA y reconoció que al menos seis vuelos de la agencia estadounidense aterrizaron en una base militar ubicada en el norte del país.

En los años previos, varias organizaciones europeas consideraron a Polonia como uno de los actores clave en la red de prisiones secretas de la CIA en el extranjero, que se convirtió en un escándalo a nivel de Derechos Humanos durante el Gobierno de George W. Bush.

Una investigación lanzada por el Consejo de Europa determinó en 2007 que "detenidos de especial valor" fueron encarcelados en una prisión alquilada por Polonia a la CIA y ubicada cerca del aeródromo de Szymany, en el norte del país. Sin embargo, las autoridades dijeron no tener datos sobre dichos vuelos.

Pese a ello, y tras una campaña lanzada por la Fundación Helsinki y la Iniciativa Pro-Justicia de la Sociedad Abierta, la Agencia de Servicios de Navegación Aérea de Polonia publicó los datos de los vuelos, que mostraban que al menos dos aeronaves utilizadas en operaciones de la CIA volaron desde Kabul y Rabat hasta Szymany al menos seis veces entre febrero y septiembre de 2003.