¿Se quedará Jacques Chirac en ayunas esta noche? El presidente francés está invitado a la cena de gala que la reina Isabel II ofrece en Escocia a todos los mandatarios del G-8, pero quizás el menú no sea de su agrado. La velada ha estado precedida por lo que el periódico londinense The Times calificaba de "metedura de pata diplomática de primer orden".
Hace apenas unos días, Chirac hablaba de los británicos con el presidente ruso, Vladimir Putin, y el canciller alemán, Gerhard Schröder, afirmando: "cómo se puede confiar en una gente con una cocina tan mala".
Ayer, la prensa británica arremetió contra "la vulgar e inapropiada" actitud del presidente, indigna de un jefe de Estado, afirmó el Daily Express. "Sería muy comprensible si la reina siente la tentación de lanzarle a ese grosero una tostada con judías", añadió el popular diario.
El más elitista Daily Telegraph sostuvo que "Jacques Chirac ha perdido la cabeza" y anda, además, un poco anticuado en modas gastronómicas. "Incluso el más chovinista de los chefs franceses reconoce hoy que Londres ha superado a París hace tiempo como calidad culinaria de Europa", señaló el rotativo. The Sun zanjó el asunto rechazando las críticas de un país donde se comen "ranas y caracoles".
