El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, denunció este jueves supuestos intentos de "alentar un estallido social" en la isla "como parte de los intereses electorales americanos", aunque no especificó quién o quiénes promueven ese escenario.

Díaz-Canel hizo estas manifestaciones en una reunión con los gobernadores provinciales en la que se evaluaron asuntos económicos y sociales, y en la que aseguró que Cuba vencerá la batalla contra la covid-19 y contra "la crisis económica que ha generado", de acuerdo a una nota oficial reproducida en los medios estatales.

"Son despiadados e incesantes los ataques a nuestras principales fuentes de ingreso. Se patentiza un recrudecimiento brutal del bloqueo y de la percusión financiera. Se evidencia, además, todo un llamado y un propósito a alentar un estallido social en el país, también como parte de los intereses electorales norteamericanos", dijo el mandatario, según dicha nota.

Las relaciones entre Cuba y Estados Unidos han caído en picada desde la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump, quien frenó el acercamiento con la isla promovido por su antecesor, Barack Obama, y endureció con nuevas sanciones el embargo económico vigente desde hace seis décadas.

Florida, decisivo

Florida, donde reside buena parte del exilio de la isla y hay unos 650.000 votantes de origen cubano, es un estado decisivo en los comicios estadounidenses y tradicionalmente se ha decantado por el Partido Republicano, al que ese sector del electorado percibe como más beligerante contra La Habana.

En la reunión gubernamental de este jueves Díaz-Canel aludió asimismo a una "campaña de descrédito hacia la Revolución en las redes sociales y a la manera en que se aborda un grupo de temas en los cuales nos tratan de dividir, como son el racismo, la violencia hacia la mujer, los derechos humanos y la libertad religiosa".

"Se intenta presentar al país con una incapacidad gubernamental y económica y, por otro lado, se ataca con saña a dirigentes, a líderes de opinión, a intelectuales y artistas, que defienden el proceso revolucionario", afirmó.

El gobernante tampoco mencionó de forma específica quién, a su juicio, está detrás de esa supuesta campaña de descrédito.

Desde la llegada del internet móvil hace casi dos años, cientos de miles de cubanos acceden a las redes sociales, donde la ciudadanía ha comenzado a compartir sus opiniones, incluyendo críticas hacia la gestión del Gobierno.