Los aparatos de votación electrónica en Estados Unidos son objeto hoy de la mirada atenta de todos debido a fallos técnicos, cuando millones de ciudadanos en 24 estados van a participar en las elecciones primarias del "Supermartes". Tras la apertura de los centros electorales en la costa este del país, las autoridades ya registraron problemas en Nueva Jersey, donde el gobernador Jon Corzine tuvo que esperar 45 minutos para emitir su voto por problemas técnicos con las máquinas receptoras de los sufragios en una estación de bomberos.

Tal como se reflejó en 2004, el problema de los aparatos electrónicos radica principalmente en que no tienen, como respaldo, un comprobante impresoque sería útil en una auditoría o recuento de votos. Además, las máquinas también son vulnerables a virus electrónicos que pueden alterar los resultados de los comicios.

La empresa consultora Election Data Services calcula que alrededor del 50 por ciento de los estadounidenses inscritos para votar lo harán a la antigua: con papeletas, pero ahora inspeccionadas por escáneres ópticos. "El problema no es tanto las máquinas sino la falta de capacitación de los empleados en los centros electorales. Las máquinas resolvieron unos problemas pero crearon otros, y las autoridades entonces buscaron alternativas", dijo hoy a Efe Kim Brace, presidente de Election Data Services.

"Esos escáneres, sin embargo, no resuelven problemas creados por los mismos votantes, como es el votar por más de un candidato en cada categoría (...). Siempre habrá riesgo de errores", observó. California, uno de los estados más poblados de EEUU y clave para las votaciones de hoy por su número de delegados, servirá de especie de laboratorio sobre la fiabilidad de los aparatos electrónicos debido a los problemas detectados allí.

El Gobierno de dicho estado decidió, tras un análisis que costó un millón de dólares, que, debido a los problemas con las máquinas en muchos sitios, los centros electorales deben tener comprobantes impresos de todos los votos. Más de 20 condados en California han abandonado el uso de equipos electrónicos por la falta de garantías sobre su seguridad.

Voto poco fiable

Ante este panorama, el cómputo de votos podría demorarse en los condados donde, en vez de esas máquinas electrónicas, los votantes recurrirán a papeletas que será "leídas" por escáneres ópticos para lograr un cómputo fiable. El condado de Riverside hizo historia en 2000 al convertirse en el primero en utilizar esos equipos, pero ahora, ante los problemas de fiabilidad, las autoridades decidieron abandonar esas máquinas.

Un estudio reciente de la Universidad de California en Berkeley destacó que, debido a esos problemas, el voto electrónico no es lo suficientemente fiable y seguro. En el caso de California, el uso de papeletas supondrá una demora en el recuento de votos en regiones desérticas o montañosas que esta noche serán trasladados en camiones hasta tribunales locales para ser contabilizadas. La demora podría ser de horas, o días. Florida, Nueva Jersey y Ohio también lideran los esfuerzos para mejorar el sistema de votación.

En las primarias del pasado 29 de enero, por ejemplo, varios condados en Florida abandonaron por completo los ordenadores y recurrieron a escáneres ópticos, en los que se introducen las papeletas de votación. Para noviembre próximo, todo el estado utilizará este sistema. En Nueva Jersey, se mantendrá el uso de máquinas electrónicas pero las autoridades electorales se han dado de plazo hasta junio próximo para incorporar comprobantes impresos, a tiempo de los comicios generales del 4 de noviembre.

En Ohio, los 57 condados que utilizan las máquinas -de un total de 88- también tendrán que cambiar sus sistemas y recurrir a escáneres ópticos para la lectura de las papeletas. Los aparatos electrónicos se hicieron populares después de las controvertidas elecciones de 2000, en las que el entonces gobernador republicano de Texas, George W. Bush, venció al vicepresidente y candidato presidencial demócrata Al Gore.

En 2000, miles de estadounidenses eligieron a sus candidatos con el uso de máquinas perforadoras, pero miles de papeletas fueron descartadas en Florida debido a que no estaban agujereadas de forma correcta. Esto dio pie a acusaciones de fraude y un volátil recuento de votos, en un caso altamente politizado que llegó al Tribunal Supremo de EEUU y acaparó titulares internacionales. Las autoridades popularizaron el uso de las máquinas electrónicas en las elecciones presidenciales de 2004 y las legislativas de 2006, pero su fiabilidad ahora está en entredicho.