Los primeros resultados no oficiales del referendo que Irak celebró el sábado indican que el borrador de la Constitución tuvo el apoyo de la mayoría de los electores. Las cifras preliminares descartan que los sunís hayan logrado los votos necesarios para poder vetar el texto, a pesar de la alta participación que se registró en tres de las cuatro provincias en las que son mayoría. "Gran parte de la gente en Irak da por hecho que la Constitución ha sido aprobada", dijo ayer en Londres la secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice.

La responsable de la diplomacia estadounidenses basó sus predicciones en las informaciones que recibió de su embajador en Bagdad, Zalmay Jalilzad, lo que irritó y levantó las suspicacias de algunos líderes sunís. "Creo que es una señal para que el Comité Electoral dé por aprobada la Constitución sin más", dijo el dirigente suní Saleh al Mutlak. Sin embargo, las cifras procedentes de los colegios electorales de las 18 provincias del país indicaban ayer que las estimaciones de Rice no iban mal encaminadas.

DOS ZONAS CLAVE La atención se centraba ayer en los datos de las cuatro provincias bajo dominio suní, ya que en las de mayoría shií y kurda el respaldo al texto constitucional estaba garantizado de antemano. Los temores a que, en al menos tres de las zonas sunís, dos tercios de los electores hubieran optaron por el no --lo que invalidaría el texto-- quedaron diluidos.

Según fuentes del Comité Electoral, en las provincias de Niniveh, cuya capital es Mosul, y en la de Diyala, con población también shií, el fue la opción más votada. Por contra, en la de Salahudin, de donde es originario el dictador Sadam Husein, el no habría obtenido un alto respaldo, así como en Al Anbar.

La participación fue baja en ocho provincias shiís del centro y del sur de Irak, según informó Carina Perelli, presidenta del departamento de asistencia electoral de la ONU. En Basora votaron el 63% de los electores, en Kerbala el 58% y en Nayaf el 56%.

De Al Anbar se desconocía ayer el índice de participación, pero se presume muy bajo debido a la fuerte presencia en la región de los grupos armados. Ayer se supo que en su capital, Ramadi, el día del referendo murieron seis soldados estadounidenses como consecuencia de un ataque con explosivos, lo que eleva a más de 1.970 los soldados norteamericanos muertos desde la invasión.

Fue el incidente más grave de los ocurridos en la jornada electoral. Las muertes de soldados están suponiendo un fuerte desgaste para la popularidad del presidente estadounidense, George Bush, que vive sus horas más bajas desde que llegó a la Casa Blanca.