El presidente del Gobierno italiano, Romano Prodi, informó hoy al Jefe del Estado, Giorgio Napolitano, de que acudirá al Senado esta tarde, a las 15.00 horas, para pedir el voto de confianza a su gobierno. Prodi, tras la entrevista mantenida durante 45 minutos con Napolitano, dijo que "ha sido un coloquio sereno y constructivo. He comunicado al Presidente de la República que me presentaré al Senado a las 15.00 horas".

En el Senado, la coalición en el poder, La Unión se encuentra en minoría después de que el pequeño partido democristiano UDEUR, del hasta ahora ministro de Justicia, Clemente Mastella, anunciara que la abandona.

Hasta ahora y sobre el papel, La Unión cuenta con 158 senadores, frente a 156 de la oposición conservadora. Los tres senadores que tiene el UDEUR han anunciado que votarán hoy contra Prodi, lo que unido a que el senador comunista Franco Turigliatto, que formó parte de la coalición, también ha dicho que votará "no", dejan al centro izquierda en clara minoría.

La sesión en el Senado comenzará a media tarde y la votación está prevista a partir de las 20 horas (19.00 gmt).

Tras conocerse la decisión de Prodi, los aliados gubernamentales resaltaron que el primer ministro se comporta como "un verdadero líder, un político de raza" y el ministro del Ambiente, Alfonso Pecoraro Scanio, subrayó que si al final cae "por lo menos todo el país sabrá quienes son los culpables si vamos a elecciones anticipadas". En las filas de la oposición conservadora, el senador Roberto Calderoli, aseguró que Prodi "caerá, pero con el honor de hacerlo con las botas puestas".

Sobre que ocurrirá si Prodi cae, el ministro para la Universidad, Fabio Mussi, dijo hoy que la única salida son las elecciones generales anticipadas (la legislatura concluye en 2011). En la misma línea que en las últimas horas, la clase política está dividida sobre los pasos a seguir. Las vías que se abren son las de un gobierno "técnico", es decir formado por una personalidad ajena a los partidos, que se encargue de preparar una nueva ley electoral o comicios anticipados. Los conservadores abogan por la vuelta inmediata a las urnas.