Los manifestantes de las protestas antirracistas 'Black Lives Matter' derivadas del asesinato de George Floyd han puesto la mirada en estatuas de militares y esclavistas y, en las últimas horas, han derribado algunas de ellas como forma de denunciar y combatir el racismo a lo largo de la historia. Ha ocurrido en Richmond (Virginia, EEUU) y en Bristol (Reino Unido). En Richmond, los manifestantes han derribado la estatua del general confederado Williams Carter Wickham, mientras que en Bristol, han derribado y lanzado al río la estatua del esclavista del siglo XVII Edward Colston. La figura de Winston Churchill en Londres también ha sufrido un acto de vandalismo. Y hace unos días, ocurrió algo similar en Boston, con la estatua dedicada a Cristóbal Colón.

En Richmond los manifestantes concentrados en el parque Monroe derribaron la estatua en la noche del sábado. Wickham era abogado, dueño de una plantación, político y general de caballería de la Confederación durante la guerra civil americana (1861-1865). La estatua data de 1891. En ese mismo parque --utilizado como hospital de campaña durante la guerra-- hay otras dos estatuas dedicadas a personalidades confederadas, una de ellas a Fitzhugh Lee, general confederado y sobrino del mítico Robert E. Lee. El gobernador de Virginia, Ralph Northam, ha ordenado la retirada de una estatua de Robert E. Lee situada cerca.

En la misma línea, el viernes el Cuerpo de Marines de las Fuerzas Armadas estadounidenses anunció la retirada de todas las banderas confederadas. "Los acontecimientos actuales son un terco recordatorio de que no basta retirar los símbolos que provocan división, sino que debemos eliminar la división en sí misma", ha declarado el comandante de los marines, el general David H. Berger. La orden incluye objetos cotidianos como tazas, carteles o pegatinas de vehículos. "La bandera de batalla confederada ha sido utilizada por extremistas violentos y grupos racistas cuyas creencias causan división y no tienen cabida en nuestro Cuerpo", afirmó Berger.

Edward Colston, polémico durante años

Mientras, en la ciudad británica de Bristol, ha sido derribada otra estatua, la del conocido esclavista y político Edward Colston, motivo de polémica durante años, durante una manifestación antirracista en la que han participado unas 10.000 personas.

Los manifestantes han utilizado cuerdas para rodear el cuello y tumbar la estatua de bronce de Colston, miembro de la Real Compañía Africana que habría transportado a 80.000 hombres, mujeres y niños como esclavos de África a América. Dedicó parte de su fortuna a obras benéficas en Bristol y tras su muerte, en 1721, se le dedicó una estatua que ahora ha sido derribada y arrojada al río Avon.

Las imágenes difundidas en redes sociales muestran como uno de los manifestantes puso la rodilla en el cuello de la estatua de Colston tras ser derribada, en una imagen parecida a la del policía que mató al afroamericano George Floyd el pasado 25 de mayo en Mineápolis y que está en el origen de la actual ola global de protestas.

La ministra del Interior británica, Priti Patel, ha calificado de "totalmente vergonzoso" el incidente. "El vandalismo es completamente inaceptable", ha afirmado Petri, que ha advertido de que distrae de la causa real de las protestas.

El historiador David Olusoga ha argumentado en declaraciones a la BBC que la estatua debería haber sido retirada hace mucho tiempo. "Las estatuas dicen 'este fue un gran hombre que hizo grandes cosas'. No es cierto. Fue un comerciante de esclavos y un asesino", ha apuntado. Una petición en Internet pidiendo la retirada de la estatua había logrado 11.000 firmas.

Ataques a las estatuas de Churchill y Lincoln

Por otra parte, durante la manifestación antirracista de este domingo frente a la Embajada estadounidense en Londres, la estatua del primer ministro británico Winston Churchill ha sido atacada y se ha pintado la frase "era un racista" en el pedestal.

Junto al pedestal se han dejado pequeñas pancartas con mensajes como "El colonialismo británico es el responsable" o "¿Y si fuera tu hijo?" y se ha adherido un pequeño cartón con el lema "Las vidas de los negros importan" a la cintura de la estatua. En los vídeos difundidos en redes sociales se puede ver la estatua y un grupo de gente gritando consignas como "Churchill era un racista" y "Boris (Johnson) es un racista". Otro grupo de manifestantes parecía intentar proteger la estatua.

De la rabia de algunos de los manifestantes de Londres no ha salvado ni Abraham Lincoln, el presidente de EEUU que abolió la esclavitud.