El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y la cancillera alemana, Angela Merkel, mantuvieron ayer un breve encuentro al margen de la cumbre que no permitió resolver sus diferencias sobre el intento de compra de Endesa por parte de la alemana E.ON, al que se opone el Gobierno español. Ambos dirigentes acordaron volver a reunirse en una cena en Berlín durante el mes de abril "para hablar de los detalles concretos que afectan a España y a Alemania" en el sector de la energía, según explicó Zapatero tras concluir el Consejo Europeo.

"El diálogo ha ido bien y va a ser una relación fluida, como casi siempre entre España y Alemania", explicó Zapatero. "El tono de la reunión fue positivo y constructivo, y hay voluntad de cooperar", añadió el presidente. Zapatero precisó, no obstante, que la mayor parte del encuentro se centró en la tregua de ETA y no en el conflicto empresarial.

La cancillera alemana se mostró mucho más parca en las explicaciones e indicó que la reunión fue meramente informativa. "Zapatero me ha informado de la situación actual y no hablamos de posibles futuros desarrollos", indicó Merkel. La cancillera aseguró que "no tiene la impresión" de que España vaya a bloquear la oferta de compra de E.ON sobre Endesa.