El presidente ruso, Vladimir Putin, desenterró ayer la retórica de la guerra fría para lanzar un ataque en toda regla contra la política unilateralista de Estados Unidos, país al que acusó del uso ilimitado de la fuerza militar y de provocar una carrera armamentística, al alentar a otros países a obtener armas nucleares. Putin fue uno de los protagonistas de la Conferencia de Seguridad que se abrió ayer en Múnich con la participación de 250 personalidades de 40 países. Sobre Irán, Putin pidió "paciencia y sensatez" a Occidente.

Si lo que pretendía el dirigente ruso era atraer la atención en el prestigioso foro de seguridad de Múnich, lo consiguió. La dureza de su intervención sorprendió a más de un delegado.

El dirigente ruso no dudó en criticar lo que calificó de militarización de la política internacional por parte de la Administración de George Bush y criticó el uso "exagerado y casi incontrolado de la fuerza en las relaciones internacionales". Putin aprovechó el lema de la conferencia Crisis global, seguridad global para denunciar que "Estados Unidos ha traspasado sus fronteras nacionales en todos los terrenos y esto es muy peligroso, porque nadie se siente seguro, porque nadie puede protegerse ya en el Derecho internacional".

Putin criticó los intentos de la Casa Blanca de construir un "mundo unipolar" y tuvo también serias palabras para los planes norteamericanos para instalar parte de su sistema de defensa antimisiles en Polonia y en la República Checa, en las inmediaciones de la frontera de esos países con Rusia. Según Putin, "esos propósitos son del todo superfluos e inútiles".

El jefe del Kremlin también se mostró crítico con la ampliación de la OTAN al este de Europa. "Nadie me ha explicado ante qué amenaza se prepara la OTAN con ese despliegue en nuestras fronteras", afirmó. El secretario general de la Alianza Atlántica, Jaap de Hoop Scheffer, declaró tras el discurso de Putin sentirse "muy decepcionado".

La cancillera alemana Angela Merkel destacó la importancia de la cooperación internacional para la búsqueda de soluciones ante retos como el del cambio climático. Además, la dirigente aprovechó la tribuna para lanzar un mensaje a Irán a propósito de su programa nuclear: el de que la comunidad internacional "no aceptará trucos". Merkel explicó que la nuclear es una tecnología sumamente delicada, y por esa razón la "cooperación ha de estar basada en la trasparencia, que Irán no ha aportado". "Si no lo hace, su alternativa es el aislamiento", dijo.

La dirigente dejó muy claro que la comunidad está decidida a impedir que Irán desarrolle armas nucleares. Putin reconoció que no entiende por qué "Irán no ha dado las respuestas y aclaraciones que pide la comunidad internacional", pero pidió ser "pacientes" y "dar incentivos que muestren al liderazgo iraní que la cooperación es mucho mejor que la confrontación con la comunidad internacional".