El presidente ruso, Vladimir Putin, instó ayer a las autoridades ucranianas a que no subordinen la cooperación estratégica con Rusia al claro rumbo europeísta anunciado por el nuevo Gobierno de Ucrania. Putin hizo esta petición en su primer viaje oficial a Kiev tras la llegada al poder del líder de la oposición prooccidental, Viktor Yuschenko, vencedor de las elecciones presidenciales de diciembre.

"Existe un punto de vista que sostiene que la creación de un espacio económico común con Rusia y la cooperación de Ucrania con la UE son pasos en direcciones contrarias. Es absolutamente falso", dijo Putin a la primera ministra de Ucrania, Yulia Timoshenko. El presidente ruso recordó que Ucrania no podrá ingresar en la UE en un futuro cercano, e invitó a Timoshenko a "armonizar paralelamente" las legislaciones de Rusia y de Ucrania con las de la UE.

Putin viajó a Kiev para zanjar las diferencias y evaluar cuál es la disposición de Yuschenko a mantener la cooperación estratégica con Rusia. El nuevo presidente ucraniano hizo su primer viaje al exterior a Moscú, en enero pasado, en un gesto muy simbólico después del apoyo abierto que el Kremlin brindó a su rival oficialista durante el proceso electoral.

ENTREVISTA CON TIMOSHENKO "Tenemos que mantener el alto nivel de cooperación estratégica, así como el diálogo político entre nuestros dos países", dijo Putin, quien se reunió dos horas con Yuschenko en la residencia oficial de éste. Yuschenko afirmó que su Gobierno "quiere mejorar esencialmente la calidad del diálogo bilateral".

El líder ruso se entrevistó también con Timoshenko y con el presidente de la Rada (Parlamento), Vladimir Litvin. En una rueda de prensa posterior a la reunión con Putin, Yuschenko informó de que los dos han acordado trazar el plan de cooperación para el 2005 y seleccionar una decena de proyectos que se pondrán en marcha este año.

Según Yuschenko, el cumplimiento de estos planes "creará las condiciones para hacer realidad las relaciones de cooperación estratégica entre ambos países". La cooperación, que incluye la ampliación de la ayuda económica y comercial, permitirá aprovechar mejor el potencial de transporte ucraniano, desarrollar los sistemas de trasiego de crudo y gas de ambos países y aumentar su aportación a la seguridad energética europea.