En un restaurante de El Cairo, una mujer se dirige a los lavabos. Sin embargo, en lugar de ir al de señoras, intenta entrar en el de caballeros. Un camarero la detiene y grita: "Señora, no puede entrar ahí. Este es el lavabo de hombres". A lo que la mujer responde: "¿Está Bin Laden ahí dentro?". Sorprendido, el camarero dice: "No, claro que Bin Laden no está ahí dentro". "Pues si en ese lavabo no está Bin Laden, que es el único hombre de verdad en el mundo árabe, yo puedo entrar ahí sin problemas", sentencia la mujer.

Chistes como este circulan por el mundo islámico y certifican como Osama bin Laden goza de una imagen de héroe a los ojos de cada vez más musulmanes. De hecho, seis años después del 11-S, policías y especialistas avisan de cómo la ideología de Al Qaeda se ha consolidado como un modelo cultural de masas.

MODO DE VIDA "Es nuestra obligación que el terrorismo sea un hecho cotidiano en todo el mundo", señaló en sus escritos Mustafá Setmarián, el gran ideólogo de Al Qaeda, para quien el gran objetivo era consolidar una conciencia yihadista global.

Un policía español radiografía así el peligro: "Al Qaeda es más que un grupo terrorista o una franquicia para violentos. Al Qaeda es hoy un modo de vida, un nuevo orden moral por el que musulmanes de todo el mundo creen reconciliarse con su fe, con su identidad y con una dignidad que sienten humillada por Occidente. Al Qaeda ha hecho que muchos crean que solo es buen musulmán el que se une a ellos o les apoya".

Varias encuestas confirman la alarma. Según un sondeo hecho en Gran Bretaña, el 13% de jóvenes musulmanes admiran a Al Qaeda, mientras que al 37% les gustaría vivir bajo la ley islámica. En el 2004, una encuesta concluyó que el 45% de los marroquís tenían una imagen favorable de Bin Laden y el 66% apoyaban los ataques suicidas en Irak.

El arabista Marcos García Rey, especialista en yihadismo global, señala que "la red de Bin Laden actúa buscando la simpatía de las masas ya que desea crear una corriente global que apoye el yihadismo ". "Conseguir esa simpatía le permite consolidar la solidaridad hacia los miembros de la red, en forma de apoyo logístico o económico, que es vital para Al Qaeda", añade.

REFERENTES Esa creciente simpatía por Al Qaeda se constata en que muchos detenidos por terrorismo pasan a ser referentes para parte de su comunidad.

Irak tiene un efecto multiplicador. "Creen que Al Qaeda está a punto de derrotar a EEUU en Irak y eso tiene un gran impacto", avisa García Rey. Ese éxito trasciende a los musulmanes y atrae ahora a descontentos con el sistema. De ahí que aumenten los conversos detenidos en acciones antiterroristas.