El Gobierno cubano ha tenido que reducir en dos ocasiones la tasa de crecimiento prevista para el año 2009. En un comienzo, se estimó que el producto interior bruto (PIB) crecería un 6%, luego redujo la cifra a solo un 2,5%, después a un 1,7%, aunque finalmente será del 1,4%. La falta de liquidez está ahogando las perspectivas de crecimiento. El desabastecimiento en las tiendas de la isla es general y, además, hay cortes en el suministro eléctrico.