La reelección del conservador portugués José Manuel Durao Barroso al frente de la Comisión Europea por otros cinco años está encallada en el Parlamento Europeo, pese al respaldo unánime de los gobiernos de los Veintisiete.

Los grupos socialista y liberal condicionaron su voto en otoño a que Barroso asuma una serie de medidas muy alejadas de lo que ha sido su gestión al frente del Ejecutivo comunitario en los últimos cinco años. Los grupos Verdes e Izquierda Unitaria, por su parte, rechazan su candidatura. A pesar de contar con el respaldo del Grupo Popular, Barroso necesita los votos de al menos una parte de los socialistas y los liberales para lograr la ratificación de su nombramiento. Barroso dijo que en septiembre presentará su programa de gobierno y que después se reunirá con los distintos grupos.