Nayaf La policía iraquí y EEUU han reforzado la seguridad ante el temor de un repunte de la violencia el sábado, día en que los shiís celebran la Ashura, su fiesta más sagrada. El pasado año, casi 170 personas murieron en varios ataques suicidas en Nayaf y Kerbala durante los ritos de esta celebración. En la foto, varios shiís se flagelan para recordar el martirio del imán Husein, nieto de Mahoma.