Autoridades británicas y francesas se reunirán mañana en el campo de refugiados de Calais (Francia) para analizar la mejor manera de atender a los niños refugiados que están solos, informó hoy la Asociación de Gobiernos Locales (LGA).

Responsables de esa organización británica -que representa a la mayor parte de las autoridades locales en Inglaterra y Gales- visitarán el llamado campo de la "Jungla", situado en la costa norte francesa, junto con la alcaldesa de Calais, Natacha Bouchart, a fin de evaluar la crisis de esos menores vulnerables que viajan sin estar acompañados por ningún adulto.

Muchos de esos niños han solicitado asilo en el Reino Unido, donde en algunos casos tienen familiares.

Se espera que en ese encuentro los dos países analicen cuál es la mejor manera de lograr condiciones "seguras" para los refugiados menores de edad y de garantizar que reciben la atención apropiada.

"Es imperativo mantener a los niños seguros allí donde se encuentren actualmente en Europa", señaló el presidente del Grupo de trabajo para el Asilo, Trabajo y Migración de la LGA, David Simmonds.

Actualmente hay unos 4.000 niños refugiados en Europa que solicitan asilo en el Reino Unido, donde su cuidado y proceso de reubicación está a cargo de las autoridades locales.

La LGA considera que la evaluación de la situación concreta de esos menores antes de que ya se encuentren en este país facilitaría la labor a los ayuntamientos y las autoridades locales para poder ayudarlos de la mejor manera.

Muchos de ellos "requerirán cuidados y paquetes de apoyo directamente de los ayuntamientos si no pueden ser reubicados con familiares que ya estén en Europa o en el Reino Unido", según observó ese responsable en un comunicado.

"Si los niños vienen al Reino Unido, los ayuntamientos locales quieren hacer lo que es correcto para que los que han experimentado condiciones horrendas en su país de origen y desde que lo abandonaron puedan adaptarse a la vida británica lo más rápido posible y de la manera más fácil con un apoyo continuo", explicó Simmonds.

El presidente de la LGA agregó que está previsto que los ayuntamientos trabajen junto con el Gobierno en la evaluación de la situación de esos menores para poder determinar sus necesidades antes de que éstos lleguen al Reino Unido.