Los radicales palestinos prometen venganza por la matanza de ayer. Era de esperar. Pero Ariel Sharon no está en guerra sólo contra los grupos terroristas. Sharon deja sin tierras a los campesinos, divide con su muro escuelas, familias y pueblos, los asfixia económicamente y causa víctimas infantiles. Amparado por su desprecio a las leyes internacionales, el primer ministro israelí no discrimina. Por eso está consiguiendo que todos los palestinos sientan como los terroristas.

*Periodista.