El Rey vuelve a la cumbre iberoamericana por primera vez desde el 'por qué no te callas'

El avión de la Fuerza Aérea española en el que viajan los Reyes y la ministra española de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, aterrizó en torno a las 22.45 horas de ayer (02.45 de esta madrugada en España) en el aeropuerto de la ciudad, donde el jefe de Estado español y la Reina fueron recibidos por el director general del Ministerio de Exteriores argentino, Alejandro Bértolo.

Quien no participará en la cumbre por primera vez desde la creación de este foro en el año 1991 será el presidente del Gobierno español. José Luis Rodríguez Zapatero ha cancelado su viaje para poder presidir hoy el Consejo de Ministros que aprobará un nuevo paquete de medidas económicas para hacer frente a la crisis.

Los efectos de la crisis económica en España y Europa iba a ser uno de los asuntos que tenía previsto tratar Zapatero en la parte de debate privado entre los asistentes a la cumbre que se conoce habitualmente con el nombre de "retiro" y que se celebrará el sábado tras el almuerzo. En este foro, el jefe del Ejecutivo español iba a trasladar a sus socios iberoamericanos un mensaje de confianza en el proceso de integración europeo, con un énfasis especial en demostrar la solidez de las bases que lo sustentan y en dejar claro que la especulación de los mercados financieros no responde a informaciones completas, sino sesgadas y fraccionadas.

AGENDA INTENSA

La agenda del Rey arrancará hoy a las 10.30 horas con una reunión con el secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, a la que también asistirá Jiménez. A las 12.30 horas, mantendrá la tradicional recepción con la colectividad española, donde pronunciará un primer discurso. Después almorzará como cada año con el presidente de México, Felipe Calderón, en un encuentro en el que le solía acompañar el jefe del Ejecutivo. En esta ocasión, participarán en el almuerzo, por parte española, el jefe de la Casa del Rey, Alberto Aza; Jiménez y el ministro de Educación, Angel Gabilondo.

Antes de que comience oficialmente la Cumbre Iberoamericana, el Rey se reunirá con el presidente saliente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, en un encuentro que les servirá a ambos para despedirse y que tenían pendiente desde que se truncara la visita a Brasilia que los Reyes pensaban hacer con motivo de su desplazamiento a Chile para participar en el Congreso Iberoamericano de la Lengua y que se suspendió por el terremoto de febrero pasado.

Es previsible que entre el viernes y el sábado Juan Carlos tenga otros encuentros bilaterales con algunos líderes, pero la agenda aún no está cerrada.

No será hasta las 19.00 horas cuando se inaugure la cumbre, un acto que irá seguido por la cena oficial que ofrecerá la presidenta Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, a los asistentes a la cumbre y donde tanto esta como el Rey pronunciarán unas palabras durante el brindis.

Los debates de la cumbre se prolongarán hasta la tarde del sábado y a su término los Reyes emprenderán el regreso a Madrid. Este es el viaje más largo que Juan Carlos ha emprendido desde la operación a la que se sometió el pasado 8 de mayo para que le extirparan un nódulo pulmonar benigno. Hasta este mes de noviembre, que hizo una gira de carácter privado por los países del golfo Pérsico, el monarca no había retomado los viajes internacionales.