Fieles al compromiso establecido con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, presidente en ejercicio de la UE, las tropas rusas comenzaron ayer a retirarse de sus puestos de control en territorio georgiano administrado por Tiflis, informaron fuentes oficiales de Georgia. Paralelamente, el ministro de Defensa ruso, Anatoli Serdiukov, estableció el alcance de la presencia militar de Moscú en las regiones rebeldes de Abjasia y Osetia del Sur. Serán 7.600 hombres en total y, como dijo el ministro de Exteriores, Serguei Lavrov, permanecerán allí "mucho tiempo". El suficiente como para "garantizar" que no se repetirán "acciones agresivas" por parte de Georgia.

El primer control desmantelado (de los 24 existentes) fue el de la región de Chiorotskusk, no lejos de la frontera con Abjasia. Unidades abjasias también comenzaron a replegarse de Ganmujuri, entre el júbilo de los residentes locales, que izaron banderas georgianas. En cuanto al resto de la franja de seguridad adyacente a las regiones separatistas, Rusia se comprometió el lunes a retirar todas sus tropas (fuera de Osetia del Sur y Abjasia) en el plazo de un mes y de la zona del puerto de Poti (mar Negro) en una semana.

El ministro ruso se reunió en Moscú con sus homólogos de Abjasia y Osetia del Sur y establecieron que serán desplegados 3.800 soldados en cada república. En Osetia del Sur se ubicarán en las ciudades de Djava y Tsjinvali (capital surosetia), y en Abjasia en los mismos lugares donde hasta el 7 de agosto estaban las fuerzas rusas de mantenimiento de paz, precisó Serdiukov.

REDUCCION EFECTIVA En el momento más álgido de la guerra entre Rusia y Georgia, el pasado agosto, llegó a haber 15.000 soldados en Osetia del Sur y 9.000 en Abjasia, según la revista británica Jane´s Defense Weekly . Por su parte, el Gobierno de Tiflis estimaba ayer que a principios de septiembre había 6.000 soldados en las dos provincias separatistas y 1.500 fuera de sus límites.

El ministro de Exteriores ruso insistió en que las autoridades de Osetia del Sur y de Abjasia deben ser invitadas a la conferencia internacional que se celebrará en Ginebra el 15 de octubre para abordar el futuro de esas dos regiones. "Los participantes no están precisados en los documentos, pero hemos dejado claro que Osetia del Sur y Abjasia deben tener un papel equitativo en los contactos", indicó Lavrov.

Mientras, los observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) seguirán ejerciendo su mandato en sus zonas de responsabilidad de acuerdo con el esquema anterior al pasado 7 de agosto, igual que los de las Naciones Unidas. La fiscalía de Osetia del Sur confirmó, por su parte, la muerte de "mas de 500 personas" durante la intervención de Georgia. Rusia sostiene que hubo 1.600 muertos.