Rusia actuó "conforme" al derecho internacional al alcanzar el jueves el fondo marino del polo Norte --a 4.000 metros de profundidad-- y colocar una bandera rusa. Así lo aseguró ayer el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en declaraciones a la agencia rusa RIA Novosti. "Cuando los exploradores llegan a un punto sin explorar, dejan banderas en él", declaró Lavrov. Según Lavrov, la propiedad de la plataforma marina del polo Norte está definida sobre la base de la Convención de la ONU sobre el Derecho del Mar (UNCLOS, por sus siglas en inglés).

En el 2001, Rusia reclamó el territorio. Al año siguiente, un comité de la ONU pidió más pruebas científicas antes de tomar una decisión. Lavrov dijo que el objetivo no era "poner en juego la reivindicación rusa, sino demostrar que la plataforma continental (de Rusia) se extiende hasta el polo Norte". La reivindicación rusa afecta a 1,2 millones de kilómetros cuadrados de mar helado.