Rusia se suma a la tendencia global y prohíbe el vuelo del Boeing 737MAX en su espacio aéreo. Primero fueron China, Francia, Reino Unido, Alemania, Irlanda, Austria y Holanda. Más tarde claudicó Estados Unidos y la Unión Europea. Ahora, Rusia.

El goteo de vetos al este modelo de avión se produce después de que un Boeing 737 MAX 8 de la compañía Ethiopian Airlines con destino Nairobi (Kenia) se estrellara el domingo al sureste de Adís Abeba poco después de despegar, con un balance de fallecidos de 157 pasajeros y miembros de la tripulación.

Las víctimas del accidente eran de 35 nacionalidades distintas, según cifras preliminares de la compañía, entre ellas 32 kenianos, 18 canadienses, 9 etíopes, 8 italianos, 8 chinos, 8 estadounidenses, 7 franceses, 7 británicos, 6 egipcios, 5 alemanes y 4 indios. También, dos españoles, un catalán que viajaba por negocios y una gallega vinculada al sector de la cooperación.

La Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) decidió suspender todos los vuelos de los aparatos MAX 8 y MAX 9 que salgan, lleguen o viajen al interior de la Unión Europea, cualquiera que sea el origen de los operadores, europeos o de terceros países.