Sadam Husein no quiere morir colgado en la horca, como "un criminal cualquiera", sino frente a un pelotón de fusilamiento. Así lo dijo ayer ante el tribunal iraquí que le juzga por crímenes contra la humanidad. El dictador compareció por primera vez frente a los magistrados desde que inició una huelga de hambre el 8 de julio, a la que puso fin ayer mismo. El exmandatario iraquí, algo más delgado de lo habitual, volvió a mostrarse desafiante. Pidió a los iraquís que "resistan a los invasores" y que "maten a estadounidenses".

En un momento de la sesión de ayer, Sadam, que compareció armado con un ejemplar del Corán, se dirigió al presidente del tribunal, el juez Rauf Abdel Rahmán, con estas palabras: "Te pido como iraquí que, en caso de dictar una pena de muerte contra Sadam Husein, recuerdes que Sadam es un militar y que la ejecución debe llevarse a cabo con disparos y no en la horca como cualquier criminal". La sentencia por la matanza de 148 civiles chiís en Duyail, que es el caso que se está juzgando, se conocerá en septiembre.

Aunque la sentencia final sea la pena capital, es muy poco probable que se lleve a cabo, ya que el presidente iraquí, el kurdo Yalal Talabani, que es el que tiene la última palabra, ha dicho en reiteradas ocasiones que nunca la firmará. Y no porque le falten ganas, sino porque como jefe del Estado se ha manifestado en contra de la pena de muerte.

SECUESTRO DE 17 PERSONAS Mientras, la violencia sigue en el país árabe. Un grupo de hombres vestidos de militares secuestró ayer a 17 personas en Bagdad. Los rehenes son 10 hombres, 5 mujeres y 2 niños. En Baquba, al norte de Bagdad, los rebeldes atacaron un convoy policial. Un policía y un civil murieron, y las autoridades detuvieron a tres sospechosos.

En Londres, las familias de los soldados británicos muertos en Irak tendrán derecho a pedir una revisión judicial para que se investigue por qué el Reino Unido decidió entrar en el conflicto. La petición había sido rechazada por el Tribunal Superior de Londres, pero el Tribunal de Apelación revocó ayer la sentencia.