El salario mínimo legal de Venezuela cayó el miércoles hasta los 3,55 dólares después de que la moneda local, el bolívar, mantuviera su vertiginoso descenso con respecto a la divisa estadounidense, por la que se cambiaba a 11.264,48 unidades en el mercado oficial.

El salario mínimo en Venezuela es de 40.000 bolívares, y es la norma en la administración pública, donde lo perciben al menos unos tres millones de trabajadores.

Además, los trabajadores ingresan todos los meses un bono de alimentación de 25.000 bolívares (2,21 dólares), que no genera pasivos laborales.

Los mismos 3,55 dólares pasan a percibir también los pensionistas venezolanos, cuyo número supera los 4,5 millones de personas, según informó en abril pasado el Gobierno de Nicolás Maduro.

Estos ingresos son insuficientes para comprar, siquiera, los alimentos para un día de una familia de cuatro miembros, aunque el Gobierno de Maduro ha dicho que complementa el salario de los trabajadores con un cuestionado plan de alimentos subsidiados, conocido como Clap, y que la oposición afirma se maneja de forma corrupta.

En el mercado paralelo de cambios un dólar se cambiaba el miércoles por una cantidad incluso mayor a los 11.264,48 de la tasa oficial.

Estos números confirman la cada vez mayor pérdida de poder del bolívar que, según establece la Constitución del país suramericano, es la única moneda de curso legal en Venezuela.