El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, y su homólogo estadounidense, Barack Obama, acordaron hoy mantener el esfuerzo militar "en apoyo de las autoridades libias legítimas" hasta que el líder Muamar al Gadafi y sus fuerzas no hayan entregado las armas.

Los dos dirigentes mantuvieron hoy una "larga" conversación telefónica y según el comunicado difundido por la presidencia gala, se felicitaron de los "avances decisivos logrados en los últimos días por las fuerzas del Consejo Nacional de Transición" y consideraron que el final del régimen de Gadafi "es ineluctable y está próximo".