Fumador empedernido, pragmático por excelencia, bocazas, arrogante o el mejor líder en tiempos de crisis son algunos de los calificativos que se repiten estos días en los medios alemanes. El merecedor, o no, de ellos es el excanciller alemán Helmut Schmidt y el motivo, los 90 años que hoy celebrará en privado sin grandes fiestas. "Estoy en mi casa de Hamburgo con tres amigos y mi compañera", explicó Schmidt.

El 90º aniversario del quinto canciller de la República Federal Alemana ha servido como excusa para retomar la figura de Schmidt como icono político en tiempos de crisis que recuerdan a algunos momentos de su mandato y que hace que algunos añoren su gestión de aquellos años.

El excanciller Gerhard Schröder publicó una carta de felicitación en el semanario Der Spiegel en la que alababa su capacidad de "liderazgo". También el actual presidente del SPD, Franz Müntefering, quiso felicitar a Schmidt. "Me alegra sobre todo que sigas siendo uno de nosotros: un socialdemócrata". Schmidt ha publicado más de un treintena de libros.