MADRID. Tras haberse enfrentado ayer a España por el pacto de estabilidad y haberla derrotado, Alemania volvió a cargar las tintas contra el Gobierno de José María Aznar. En esta ocasión, el canciller Gerhard Schröder (en la foto, reflejado en una ventana, ayer en el Bundestag) criticó el reparto de poder pactado en Niza que, en su opinión, beneficia a países como España y Polonia. "No se puede dar 29 votos a 82 millones de alemanes y 54 votos a 80 millones de polacos y españoles en conjunto. Es algo que no resulta equilibrado", clamó ayer el dirigente alemán durante su intervención en el Bundestag. Schröder apeló a estos dos países a que den muestras de flexibilidad y "estén abiertos a compromisos" en la reforma del Consejo Europeo. Sin embargo, Schröder auguró nuevos conflictos.