El Movimiento Sin Tierra (MST) invadió una hacienda de 798 hectáreas en Sao Paulo y la bautizó Patria libre . La acción se hizo para "recordarle" al presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva que debe acelerar su anunciado proyecto de reforma agraria.

La coordinadora regional del MST, Maria Rodrigues, señaló que la toma de la hacienda Santa Isabel es un aviso al Gobierno de que los tiempos no son eternos.

700 PERSONAS

La ocupación comenzó el sábado a cargo de 500 personas. El grupo llegó en diez omnibuses y derribó la cerca principal. Pero ayer, el número de personas ocupantes de la hacienda superaba las 700, entre ellas 140 niños. Una parte de las familias vinieron de la misma ciudad de Sao Paulo.

Los sin tierra se proponen levantar barracas y cultivar la tierra con la ayuda de la Iglesia católica. "Gracias a esa ayuda nadie pasará hambre", dijo Rodrigues. "Le estamos recordando a Lula que existen reivindicaciones que no fueron resueltas por el anterior Gobierno", subrayó.

APOYO DEL PT

Gilmar Mauro, considerado el número dos del MST y miembro del Partido de los Trabajadores (PT, en el poder), apoyó la invasión de Santa Isabel. "Si hay personas que pueden ser ubicadas en áreas improductivas, la ocupación es una forma de demostrar cómo resolver el problema", subrayó.

Aunque son autónomos, el PT y el MST han recorrido un largo camino de coincidencias. La llegada de Lula al poder generó una fuerte expectativa, especialmente tras nombrar como ministro de Desarrollo Agrario al exvicegobernador de Río Grande do Sul, Miguel Rosseto, un exsindicalista de posiciones cercanas a los sin tierra .

Y es que en el inmenso Brasil, la propiedad de las tierras es uno de sus mayores problemas, pues el 5% de la población es dueña del 80%.