El alto representante de la política exterior de la Unión Europea (UE), Javier Solana, dijo ayer que los Veinticinco harán todo lo posible para que no se vuelva a repetir una crisis como la que ha generado la publicación de las caricaturas de Mahoma en varios diarios europeos. Este fue uno de los mensajes que transmitió ayer Solana al secretario general de la Organización de la Conferencia Islámica (OCI), el turco Ekmeleddin Ihsanoglu, con el que se entrevistó en Yeda (Arabia Saudí), primera escala de una gira por Oriente Próximo.

"No ha sido nuestra intención ofender a los musulmanes ni lo será nunca", dijo Solana. El jefe de la diplomacia europea dio su apoyo a la iniciativa de la OCI, que agrupa a 57 países musulmanes, para que el organismo de la ONU para los Derechos Humanos contemple en sus estatutos "el respeto a todas las religiones y la prohibición de difamar a la religiones y a sus profetas", señaló Ihsanoglu. El secretario general de la OCI pidió, además, que el Europarlamento adopte leyes que contribuyan a combatir en Europa la "islamofobia".

EL NUEVO ESCENARIO Coincidiendo con la visita de Solana a la región, el diario israelí Maariv publicó extractos de una reunión que recientemente mantuvieron el representante de la UE y dos asesores del primer ministro israelí, Dov Weisglass y Shalom Turjeman. Según el diario, la UE pretende coordinar su política en Oriente Próximo con Israel dado que, en palabras de un funcionario europeo, "una viñeta en un remoto periódico lo ha cambiado todo".

Según el diario, Solana dijo que "la democratización según el modelo de Washington encierra muchos peligros, ya que puede llevar a una situación en la que regímenes extremistas musulmanes gobiernen desde Marruecos hasta Afganistán".