Un joven somalí fue detenido la noche del viernes tras intentar asesinar en Dinamarca al dibujante danés Kurt Westergaard, uno de los autores de las polémicas caricaturas de Mahoma publicadas hace cuatro años por un diario de Copenhague. El agresor, de 28 años, está acusado de doble intento de asesinato, el del caricaturista y el de un agente policial, y de mantener contactos con la milicia islamista somalí Al Shabab y con otros grupos de Al Qaeda en el este de Africa.

Las fuerzas de seguridad danesas no han revelado todavía el nombre del somalí ni tampoco han mostrado su rostro, aunque los medios de Dinamarca lo han descrito como un joven con barba y la cabeza totalmente rapada. El asaltante se presentó en el domicilio de Westergaard, situado cerca de la localidad de Aarhus, en el oeste de Dinamarca, armado con un hacha y un cuchillo y gritando en un mal danés "venganza" y "sangre". En el momento del ataque, el dibujante estaba en la casa acompañado de su nieta de cinco años de edad.

"Fue horrible", dijo el caricaturista, de 74 años, a los medios locales. Westergaard salvó su vida y la de la pequeña porque se refugió en un baño de su casa, diseñado como un búnker desde que empezó a recibir todo tipo de amenazas después de que se publicara su viñeta en el diario Jyllands-Posten . "Lo más importante es que tuve el reflejo de pensar y ponerme a salvo en un lugar seguro. Pero estuvo muy cerca, estuvo verdaderamente cerca", explicó.

Westergaard es el autor de una de las viñetas que generaron más polémica e indignación entre los musulmanes. La caricatura mostraba a Mahoma --figura que el islam prohíbe dibujar y representar-- con una bomba a punto de estallar en el turbante.

Desde el cuarto de baño, el dibujante llamó a la policía, que en pocos minutos llegó a la casa. El joven somalí, con residencia legal en Dinamarca, se enfrentó con los agentes, y a uno de ellos le lanzó el hacha e intentó después agredirle con el cuchillo. La policía disparó contra el agresor, que resultó herido de bala en una pierna y una mano. El detenido fue operado de las heridas horas después en un hospital.

Los servicios secretos daneses (PET) explicaron ayer que el joven somalí no solo mantiene lazos con los extremistas de Somalia y con Al Qaeda, sino también con una célula islámica con vínculos en Dinamarca. "El PET se toma muy en serio este caso, que una vez más confirma la amenaza terrorista contra Dinamarca y el dibujante Kurt Westergaard en particular", señaló en un comunicado el jefe del servicio secreto, Jakob Scharf.

La publicación de las polémicas caricaturas de Mahoma abrió en el 2006 una grave crisis en el Gobierno danés, que se vio presionado por los países musulmanes, que boicotearon sus productos. A pesar de que el Ejecutivo de Copenhague pidió disculpas y el diario hizo lo propio después, extremistas musulmanes protagonizaron violentas protestas en países de Oriente Próximo, Asia y Africa. Los disturbios se saldaron con al menos 50 fallecidos y fueron atacadas tres embajadas de Dinamarca.

Los radicales ofrecieron un millón de dólares (unos 700.000 euros) de recompensa a quien matara a Westergaard y a los dibujantes que colaboraron con el diario danés, que en su polémica edición publicó hasta 12 viñetas diferentes sobre el profeta. En el 2008, el líder de Al Qaeda, Osama bin Laden, dijo que Europa debía ser castigada por eso.