La localidad bosnia de Srebrenica conmemoró ayer en presencia de decenas de miles de personas y delegaciones de numerosas países del mundo el decimoquinto aniversario de la matanza de unos 8.000 varones musulmanes. Los restos mortales de 775 víctimas de la masacre recientemente identificadas recibieron sepultura en el centro memorial de Potocari, en las inmediaciones de Srebrenica.

Se calcula que unas 50.000 personas acudieron a Potocari para asistir a la ceremonia, según medios locales. Entre otros estuvieron presentes Yves Leterme, primer ministro de Bélgica, país que ahora preside la Unión Europea (UE), el ministro francés de Exteriores, Bernard Kouchner, el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, el presidente de Serbia, Boris Tadic, y el embajador estadounidense en Bosnia, Charles English, quien dio un mensaje del presidente de EEUU, Barack Obama.

"El horror de Srebrenica es una mancha en la conciencia colectiva del mundo. Nuestra obligación es recordar lo ocurrido e impedir que sucedan crímenes en el futuro", dijo Obama.

MAS RESTOS Fue el mayor entierro colectivo de víctimas de la matanza, ocurrida en julio de 1995, cuando las tropas serbobosnias del general Ratko Mladic conquistaron el enclave, entonces zona protegida por la ONU, pocos meses antes del fin de tres años y medio de la guerra civil bosnia que enfrentó a musulmanes, serbios y croatas.

Hasta ahora han sido sepultadas en el cementerio del centro memorial de Potocari 4.524 víctimas, identificadas mediante análisis de ADN. Sus cadáveres fueron exhumados en varias fosas comunes en el este de Bosnia. Tras la masacre, los serbios arrojaron los cuerpos de las víctimas en fosas comunes. Luego, los trasladaron a fosas más pequeñas para ocultar la matanza.

Ayer, durante la ceremonia, madres y esposas lloraron ante el desfile de féretros. "Ya no me queda nada por perder", dijo Hatidza Mehmedovic, de 58 años, quien vio morir a su marido y dos hijos, de 21 y 18 años. "Ahora solo espero justicia".