El número de muertos por el incendio en un céntrico edificio de oficinas de la ciudad de Lahore, en el este de Pakistán, subió al menos a siete tras el último recuento de los las autoridades, informó hoy a Efe una fuente policial.

El siniestro, que se declaró ayer cerca del mediodía local, ha sido controlado pero fuentes de los equipos de bomberos precisaron a Efe que aún están enfriando los restos del inmueble para poder entrar y que temen que pueda haber algún cadáver en el interior.

Diarios locales elevan el número de víctimas mortales a entre ocho y diez, pero no especifican sus fuentes.

Varios de los fallecidos perecieron por las heridas sufridas tras arrojarse o caer al vacío huyendo del incendio, que ha dejado heridas a seis personas que están ingresadas en hospitales de la ciudad, según un responsable de la comisaría cercana al incidente.

Entre los heridos hay dos miembros de los equipos de rescate, según dijo a Efe una fuente de este cuerpo.

El fuego se declaró por causas aún no aclaradas entre la séptima y la décima plantas del inmueble, situado en la calle Edgerton, y una treintena de personas consiguieron librarse del fuego al subir a la terraza del edificio, donde fueron rescatados con helicópteros.

Según el canal local Geo, las labores de rescate y extinción del fuego se vieron entorpecidas por las dificultades de los vehículos de bomberos para acceder a la zona y el primer camión de bomberos tardó media hora en llegar.

Mientras los equipos de ayuda se ponían en marcha,los afortunados que llegaron a la terraza intentaron ayudar a los atrapados más abajo y les tendieron cuerdas para que escalaran, pero al menos un par de ellos resbalaron y cayeron al vacío.

Lahore, con más de 6 millones de habitantes, fue el año pasado escenario de algunos incendios mortales en edificios públicos, suceso bastante habitual a causa del mal estado de las instalaciones y de la escasez de medidas antiincendio en el país asiático.